Scream Queens, la nueva serie parodia de las películas de terror de los 90

¡Hola a tod@s!

Hoy os traigo la reseña de los primeros capítulos de Scream Queens, una serie que empecé el otro día y que me está gustando mucho. 

Scream Queens es la nueva serie de Ryan Murphy, creador de American Horror Story y Glee, y se trata de una antología, es decir, que cada temporada tiene una historia diferente (al igual que ocurre con su hermana mayor).

En esta primera temporada, nos centramos en una fraternidad de chicas llamada Kappa Kappa Tau (KKT), una asociación tan elitista como superficial. En ella podemos encontrar un grupo de chicas claramente diferenciado, cuya abeja reina es Chanel (Emma Roberts), una muchacha egoísta y caprichosa, que adora acosar a todo el mundo y sueña con convertirse en presentadora de televisión. A su lado, se encuentra un séquito de chicas cuyos nombres nombres desconocemos, ya que todas han sido bautizadas como Chanel #2 (Ariana Grande), Chanel #3 (Billie Lourd), Chanel #4 (que no aparece) y Chanel #5 (Abigail Breslin), que se encargan de que los deseos de Roberts se cumplan siempre.

Dada la mala reputación que da esta fraternidad a la universidad, la decana, que odia abiertamente a las Chanel, ordena que cualquiera puede entrar en esa fraternidad, siempre y cuando sea estudiante. Así es como llegan personajes de lo más variopintos, como Neckbrace (Lea Michele), una vlogger de velas o una sorda amante de las canciones de Taylor Swift. También aparecen otros como Nick Jonas o Skyler Samuels (The Duff), cuyo pasado está muy vinculado con KKT.

Por otro lado, nos cuentan una historia paralela: en 1995, una adolescente embarazada, murió durante el parto, dejando a un niño cuyo destino desconocemos. Y ahora, 20 años después, alguien, disfrazado de Diablo Rojo, ha empezado a matar a todos aquellos que tienen algún tipo de relación con KKT... ¿Quién es el asesino y por qué lo hace?

Opinión Personal:

Admito que no apostaba ni un duro por esta serie de televisión. Soy un gran seguidor de American Horror Story pero las dos últimas temporadas me han dejado un sabor tan agridulce que comenzaba a dudar del producto Murphy. Debo admitir que, al menos de momento, con esta nueva serie me ha ganado, aunque probablemente acabará en cancelación ya que los datos de audiencia no acompañan, pese a la gran cantidad de estrellas que aparecen en cartel.

Esta serie probablemente os recordará a muchos a la saga Scary Movie y es que, en cierta manera, comparten muchas similitudes. Scream Queens no busca que la tomen en serio, no es pretenciosa, y se ríe de muchos de los clichés que suelen aparecer en las pelis de terror con escenas de lo más absurdas, como la más importante de Chanel #2, y personajes con personalidades muy marcadas (y típicas), a las que crítica. Por ejemplo, tenemos al típico alumno que se convierte en reportero, a la protagonista diseñada para que nos caiga simpática (Samuels), la inconformista (Keke Palmer), entre muchos otros. 

Esta serie es una completa mamarrachada y petarda, en el buen sentido. Hacía falta una serie de televisión, dirigida principalmente a un target adolescente, como esta: es divertida, desenfadada y tiene unos personajes, que podrás amarlos o odiarlos, pero que siempre dejan momentazos (la fiesta de Chanelween, del capítulo 4, es simplemente alucinante, una clara parodia de Taylor Swift). La serie sabe combinar el gore con la comedia (principalmente, por la atmósfera de estupidez, tan presente en la mayoría de los personajes)  y, si pensabais que no os podíais reír con escenas desagradables, probablemente lo haréis en este caso (y si no lo hacéis, no me juzguéis por reírme con cosas macabras). Los efectos sangrientos son tan de serie B, de película mala, que simplemente me encantan. Cualquier día nos sacarán sangre que parece ketchup.

A pesar de todo, creo que no es una serie para todo el mundo. Probablemente muchos nos pillarán esa combinación de parodia con gore y verán una serie estúpida, que lo es, sin duda, pero, a diferencia de muchas otras, esta lo sabe y lo explota al máximo, consiguiendo unos resultados más que satisfactorios. Hay muchas bromas que beben directamente del mainstream más puro, que muchos no entenderán o considerarán estúpidas.

En definitiva, nos encontramos con una serie muy divertida que busca reírse de sí misma, con unos personajes de lo más variopintos y estereotipados y una atmósfera que muy pocas series de televisión actuales pueden aportar. Muy recomendable.