Reseña Háblame bajito de Macarena Berlín

¡Hola!

Hoy os traigo la reseña de un libro que recibí hace poquito de Edición Anticipada. Se trata de la novela de la periodista Macarena Berlín, su primera incursión en la narrativa, Háblame bajito. 

Título: Háblame bajito

Autora: Macarena Berlín

Editorial: Suma

Número de páginas: 300

Precio: 16,90

Sinopsis:

A Pita no le contaron que la vida a los cuarenta iba a ser ligeramente distinta a lo que esperaba. Es una profesional de éxito, directora de un conocido programa de radio, hija de un padre que la adora, runner, amiga de sus amigas y tantas cosas que a veces ni ella misma sabe por dónde empezar. En definitiva: Pita es una mujer de hoy. Pero desde hace poco, también es una mujer que deberá aprender a vivir de manera distinta.

A partir de ahora, Pita viaja sola.

Con una ruptura sentimental a sus espaldas, entre mudanzas, programas de radio y una insólita propuesta, la de escribir una novela, la vida de Pita es la historia de cualquiera de nosotros, la que empezamos a construir cuando nos emancipamos de nuestros miedos y nos lanzamos a la vida que empieza donde se cierran antiguas puertas y se abren las de las nuevas oportunidades.

Opinión Personal: 

Háblame bajito es la historia de Pita, una periodista cuarentona que ve que su vida se está desmoronando  poquito a poco: decide romper la relación con su pareja porque, simplemente, ya no hay amor, su trabajo como periodista le apasiona pero, en el fondo, siente que hay algo que no va bien con su vida. Pita ha entrado básicamente en una crisis de identidad: siempre se ha dejado arrastrar por un padre demasiado metoentodo y, ahora, tiene que enfrentarse a sus propios miedos, a los huecos intrínsecos que la vida le va dejando. Tiene la sensación de que ella ya no controla su vida, que va dando bandazos, cuando esta decide tomar un camino diferente al esperado. El mensaje de la novela es no dejarse llevar por el miedo pero que necesitamos esa incertidumbre en nuestra vida para no acomodarnos, para intentar mejorar y superarnos. Seguir siempre adelante con las personas que nos quieren y olvidarse de los malos rollos que a veces la propia sociedad crea.

A lo largo de la historia, sinceramente, vemos muy poca trama: es la historia de una periodista insatisfecha con su vida que se pregunta, siempre relacionándolos con aspectos de su vida personal y con temas de actualidad periodística-como la entrevista que hace a un superviviente del atentado de Charlie Hebdo-, qué hacer exactamente con su vida, de la necesidad de hacer nuestro propio camino sin dejarnos llevar por las opiniones de los demás. La autora reflexiona a lo largo de la novela de temas como el feminismo o la decisión de algunas mujeres de no ser madres o sobre la importancia de la amistad verdadera. Esta es la historia de Pita, pero bien podría ser la de la propia autora: no es difícil imaginar una sintonía entre ambas. 

Puedes dominar a una persona, a una bestia, pero al mar no lo domina nadie. El mar es oscuro, profundo y urgente  como la vida. Si te atrapa una ola, relájate; húndete, da vueltas, traga agua, sal a flote y escupe. Pero si viene tu ola, construye: súbete a ella y disfruta.
¿Qué otra cosa podemos hacer? ¿Qué otra cosa tenemos aparte de una ola única e irrepetible?

En Háblame bajito no hay historias de amor, no hay aventuras, ni cuentos de princesas con un final necesariamente feliz...pero sí somos testigos de un viaje de descubrimiento, de conocerse a uno mismo. Sí es verdad que, personalmente, esperaba encontrarme algo más que eso: justo cuando se pone realmente interesante, se termina. Quizá me hubiese gustado ver cómo le iban las cosas más adelante aunque, al final la lectura, intuimos que le irá bien.

3/5

Háblame bajito no es novela de grandes tramas, es un viaje: es íntimo, personal y único como la vida. Es la necesidad de saber esquivar los golpes, de saber encontrar un camino que nos guíe hacia adelante y saber disfrutarlo. Háblame bajito es, simplemente, la vida misma y tú, al igual que lo hace Pita, podrías ser el protagonista de este viaje.