Reseña Orange is the new black (serie)

¡Hola a tod@s!

Hoy os traigo la reseña de la primera temporada de Orange is the new black, una serie que se estrenó el pasado año y que ha tenido bastante éxito. Tengo entendido que este año se estrenará la segunda temporada, espero que sea cierto.

Título: Orange is the new black

Número de episodios: 13 (de 60 minutos)

Año: 2013

País de origen: USA
Idiomas: Español, inglés

Sinopsis:

Piper Chapman (Taylor Schiling), una mujer de Connecticut con una vida estable y un alto cargo ejecutivo, es detenida a raíz de un delito de drogas que cometió hace una década: en aquellos días llevó un maletín con droga para Alex Vause (Laura Prepon), una traficante y antigua amante de Piper. Tras el juicio, es enviada a prisión de mujeres en Litchfield, Nueva York. Basada en las vivencias reales de Kerman, cuya experiencia entre rejas le sirvió para escribir el best-seller autobiográfico 'Orange Is The New Black: My Year In A Women's Prison'. A medio camino entre el drama y la comedia, una aclamada serie -fue una de las que mejor críticas obtuvo en su primera temporada en el 2013- que aborda temas relacionados con la cárcel como el sistema penitenciario norteamericano, el lesbianismo, la represión sexual, el abuso de poder o la corrupción policial.

Opinión Personal: No hay spoilers 

Comencé Orange is the new black sin demasiadas expectativas. De hecho, algunos compañeros de clase me habían hablado tan mal de ella que no esperaba gran cosa. Y me alegro de, pese todo, haberle dado una oportunidad porque me ha sorprendido muchísimo.

Esta serie, una coral femenina, está basada en hechos reales. Hace años, una mujer llamada Piper Kerman escribió un libro sobre su experiencia en una cárcel de mujeres, en la que pasó un año por un delito relacionado con drogas. Su historia tiene muchas similitudes con la historia que se cuenta en esta serie (de hecho, la propia autora ha estado pendiente de los guiones para que la historia sea lo más fiel posible) pero supongo que tendrá bastantes cambios para alargar la trama y, así, poder enganchar a los espectadores durante más tiempo.

Como he dicho más arriba, la serie es una coral femenina. Olvidaros de personajes masculinos porque las tramas se centran en las mujeres. Mujeres de diferentes nacionalidades, de diferentes culturas, de diferentes tonos de piel...pero que tienen mucho en común pues, todas ellas, se encuentran en prisión, aunque los motivos sean muy diferentes. La serie cuenta con un elenco de excéntricos personajes como Red, una rusa que se hace cargo de las cocinas, o "Ojos Locos", uno de mis personajes favoritos, que dan personalidad a la serie. Muchas no son más que estereotipos al principio de la temporada pero que, con el paso de los capítulos, obtienen una mayor profundidad y una mayor relevancia en la historia. Todas tienen una historia detrás que te hace entender por qué están en la cárcel y, en cierta manera, acabas simpatizando con muchas de ellas. Eso sí, en ningún momento se intenta justificar los delitos que las protagonistas han cometido.

En esta serie vemos cómo funciona una cárcel de mujeres desde su interior. No sé hasta qué punto serán así las cárceles en los Estados Unidos pero la visión que se presenta en la ficción resulta completamente escalofriante. Hay muchas normas que se deben cumplir como, por ejemplo, el hecho de que las mujeres solo se pueden sentar a comer con las mujeres que comparten su misma nacionalidad. Muchas de las presas, pese a todo, se tratan como si fueren una auténtica familia y yo, a través de la pequeña pantalla, me he sentido incluido en esa pequeña  familia  Para los más sensibles, quiero advertiros de la presencia de escenas de sexo lésbicas explícitas pero que resultan nimias si las comparamos con el resto de tramas.

Conocemos también las malas condiciones en las que viven las presas: comidas con moho, duchas con hongos, controles y registros rutinarios... En este sentido me ha sorprendido muchísimo porque no sabía que la cárcel (por lo menos en esta ficción) pudiera llegar a ser tan "inhumana".

La serie sabe combinar muy bien ingredientes que, en apariencia, resultan incompatibles. Hay muchas escenas de humor, pero también se pueden encontrar momentos de tristeza, de horror. A través de los ojos de Piper, la protagonista, descubrimos los horrores que se esconden dentro de esas paredes (como la sala de aislamiento, uno de los lugares más horribles que podría imaginar) donde la corrupción y el abuso de poder es el pan de cada día. Debo reconocer que, en parte, no he conseguido congeniar muy bien con el personaje porque me parece un poco estúpida. Casi todas las desgracias le ocurren porque no sabe cerrar la boca cuando debe hacerlo.

En la serie aparecen actores bastante conocidos como, por ejemplo, Jason Biggs (American Pie) o Laura Prepon (Aquellos maravillosos 70, Como conocí a vuestra madre). Hay una gran química entre todos los actores, de hecho, entre los dos actores arriba mencionados y la protagonista, Taylor Schilling, surge un triángulo amoroso que te mantiene en vilo durante toda la temporada. Un magnífico elenco que, sin duda, contará con nuevas incorporaciones en la próxima temporada.

Y, en cuanto al final, qué decir. Realmente no sé por dónde van a llevar la serie en las próximas temporadas (se supone que hay dos temporadas más confirmadas) pero, tras ese final, estoy impaciente por saber cómo seguirá todo. Es, ¡increíble! 

4'5/5

Orange is the new black ha resultado ser una auténtica revelación. Olvidaros de los comentarios negativos hacia la serie y lanzaros de cabeza a la piscina. Esta serie tiene un poco de todo y seguro que os sorprende (para bien). Una serie que va más allá de las escenas de sexo gratuito y de los estereotipos para mostrarnos el lado más humano de las presas. Absolutamente recomendable.

P.D. Os dejo con la intro de la serie, que me tiene super enganchado.